Reducción de la fatiga visual: Las gafas anti luz azul filtran la radiación de alta energía emitida por pantallas, disminuyendo la tensión ocular y la fatiga visual.
Mejora del sueño: Al bloquear la luz azul antes de dormir, se favorece la producción de melatonina, lo que ayuda a conciliar el sueño más fácilmente.
Protección contra daños a largo plazo: La exposición continua a la luz azul puede contribuir a problemas oculares y trastornos del sueño a largo plazo, por lo que las gafas ayudan a prevenir posibles daños.
Aumento de la productividad: Al reducir el cansancio visual, se mejora la concentración y el rendimiento en el trabajo o estudio.
Prevención de problemas visuales: Las gafas anti luz azul pueden ayudar a prevenir la aparición de síntomas asociados con el Síndrome de Visión por Computadora (CVS).
Es importante recordar que si bien las gafas anti luz azul pueden ser beneficiosas en ciertas situaciones, también es recomendable tomar descansos regulares de las pantallas y mantener una buena higiene visual en general.